“-Yo no sé si es un pecador- respondió el hombre- pero lo que sí se es que yo antes era ciego ¡Y ahora puedo ver!”
JUAN 9:25
Jesus había sanado a un hombre ciego de nacimiento en día de reposo. Esto, como se imaginarán, puso a los fariseos y maestros de la ley como locos, por lo que llegaron a la siguiente conclusión:
Prefirieron culpar a Jesús de pecador, juzgarlo por haberlo hecho en día de reposo y anular el milagro, pues dudaban de la ceguera de nacimiento de este hombre. A veces estamos tan enfocados en encontrarle la razón a todo y olvidamos el milagro.
Llegaste a fin de mes con el dinero que tenías, según tus cálculos no serían suficientes; pero pudiste cubrir tus necesidades y hasta sobró... ¿Qué haces primero? ¿Buscar una calculadora para saber qué pasó o dar gracias?Este hombre pudo ver por primera vez; pero nadie se alegró por ello excepto el.
Reflexión: Hoy viernes, es un buen día para agradecer. ¿No lo entiendes? da gracias aún en medio de eso.
Oración: Dios ayúdame a ver tu mano siempre y ser agradecida.